La universidad apuesta por estas áreas de especialización para luchar por uno de los 15 campus internacionales de excelencia que seleccionará el Ministerio de Educación · Precisará una inversión de 200 millones de euros

Málaga Hoy | Noticia

La Universidad de Málaga (UMA) apuesta por la especialización en la hortofruticultura y el turismo para convertirse en campus de excelencia internacional y ganar así uno de los 15 puestos en la futura liga de honor de las universidades españolas. Este club contará con financiación extraordinaria de las administraciones públicas con el objetivo final de que este puñado de universidades puedan colocarse en puestos relevantes en las clasificaciones internacionales, una de las grandes asignaturas pendientes de los estudios superiores en España.

Cincuenta universidades compiten en esta convocatoria que resolverá el Ministerio de Educación el 29 de septiembre. El proyecto de la UMA implica una inversión global de 200 millones de euros para crear un campus de excelencia internacional que destaca por "aunar las fortalezas internas de la universidad y las externas de la provincia", de modo que pueda "tener un reflejo eficaz en el sistema productivo y contribuir a su transformación", resalta el vicerrector de Investigación, José Ángel Narváez.

La UMA ha valorado también que un millar de los 2.300 docentes, de ellos el 60% doctores, investigan en los campos de la fruticultura y el turismo, por lo que existe una masa crítica importante "que proporciona a la universidad un gran currículum tanto investigador como formador", puntualiza el director del Secretariado de Investigación, Víctor Muñoz.

Además, se trata de áreas de especialización "diseñadas con un perfil muy transversal", de modo que incluyen, en el caso del turismo, desde las TIC, logística, ebusiness, marketing o gerontoinmigración hasta la puesta en valor del patrimonio. En el apartado de la hortofruticultura esta área se abre a la biotecnología vegetal, al incluir la investigación en semillas, abonos, lucha contra plagas, técnicas de cultivo y producción e, incluso de comercialización y distribución, pero también comprende aspectos relacionados con la sostenibilidad y las energías renovables.

El proyecto presentado por la UMA vincula a la hortofruticultura y turismo como áreas de especialización seis subproyectos relacionados con la mejora del docente, de la excelencia científica, modernización de las infraestructuras internas así como de la transferencia de tecnología, el espacio europeo de educación superior y la interrelación con el entorno territorial.

Las infraestructuras de partida son el instituto de hortofruticultura que, en alianza con el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), se ha previsto en el parque científico, así como el centro de bioinnovación, ya en marcha en el PTA, y la propia Oficina de Transferencia de los Resultados de la Investigación (OTRI), que se prevé ampliar creando secciones especializadas en hortofruticultura y turismo que den valor "estratégico y de mercado" al trabajo que realizan los investigadores para que su transmisión al tejido productivo gane inmediatez.

Las universidades elegidas en la primera fase de selección contarán con 200.000 euros para elaborar el proyecto definitivo y cinco millones para ejecutar el plan de investigación y transferencia que se referirá en esencial a la compra de equipos, adaptación de espacios y contratación de personal. Además las universidades contarán con líneas de financiación tanto del Gobierno como de las comunidades autónomas para desarrollar sus campus. 

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